
Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC)
El TOC (trastorno obsesivo compulsivo), como las fobias, se clasifica como un trastorno de ansiedad y tiene dos componentes principales:
- Las obsesiones
- Las compulsiones
Las obsesiones sufridas son pensamientos recurrentes y persistentes.
Los pensamientos obsesivos no se basan en la realidad, por ejemplo, una víctima de ellos puede creer que existen gérmenes y bacterias en todas partes, que son los que le causan los sentimientos de ansiedad.
Las compulsiones son comportamientos repetitivos.
Las compulsiones son impulsos físicos para realizar acciones, por ejemplo sería lavarse las manos de forma repetitiva para reducir los sentimientos de ansiedad causados por pensamientos obsesivos.
Para quienes padecen TOC, las compulsiones tienen dos propiedades:
- Compulsiones de naturaleza repetitiva. Lavado repetitivo de las manos
- Compulsiones para controlar o reducir la ansiedad. El lavado excesivo de manos es causado por un miedo excesivo a los gérmenes y bacterias siendo ésta una respuesta a la obsesión.
Características emocionales
Algunos pacientes con TOC, a su vez, pueden experimentar depresión.
Además, el TOC a menudo puede conducir a la depresión, ya que la ansiedad experimentada puede provocar un estado de ánimo bajo y pérdida de placer en las actividades cotidianas porque las actividades cotidianas se ven interrumpidas por pensamientos obsesivos y compulsiones repetitivas.
Los ejemplos de pensamientos recurrentes incluyen:
- Miedo a la contaminación, por suciedad o gérmenes
- Miedo a la seguridad, al dejar puertas o ventanas abiertas
- Temores religiosos de ser inmoral
- Perfeccionamiento, miedo a no ser el mejor.
En estos casos una terapia psicoanalítica es la solución ante este tipo de trastornos.